Polémica 6: Abuso de Menores
El escándalo explotó como una bomba en 1993. Por la denuncia del padre de un menor, las fiscalías de Los Ángeles y Santa Bárbara presentaron cargos criminales contra Michael Jackson por abuso sexual de menores.
Varios guardaespaldas llegaron a declarar que Michael dormía con chicos en la misma cama y que escondía fotos de ellos desnudos. Pero los abogados de Jackson se defendían frente a "un chantaje de 20 millones de dólares" que quedó en la nada, casualmente porque el mismo Michael Jackson pagó no 20 millones, sino 24 millones de dólares fuera de tribunales, para que el padre del menor retirara los cargos.
Sólo él sabía la verdad y la causa criminal quedó cerrada en octubre de 1994, después de trece meses de investigaciones y más de 400 interrogatorios.
Desde siempre, Michael mantuvo su inocencia y cuando le preguntaron si alguna vez había tenido algún contacto sexual con un menor contestó: "Nunca, nunca. Yo nunca podría herir a un chico. No es lo que siento en mi corazón, no es lo que soy yo..."
¿Por qué pagó entonces la indemnización que le evitó el juicio? Según él, por consejo de sus abogados, para darle un punto final a las especulaciones y un juicio que podía haber durado más años sin siquiera tener la certeza de poder ser declarado inocente, a pesar de su "consciente y completa inocencia".
Pero el juicio fue inevitable cuando surgieron nuevos cargos de otros menores y después de cinco largos meses, en Santa María, California, en mayo del 2005, la justicia finalmente lo declaró inocente por los cargos de abuso sexual de menores, aunque el público, ante la duda, ya lo había declarado culpable, mucho antes del veredicto oficial.
Varios guardaespaldas llegaron a declarar que Michael dormía con chicos en la misma cama y que escondía fotos de ellos desnudos. Pero los abogados de Jackson se defendían frente a "un chantaje de 20 millones de dólares" que quedó en la nada, casualmente porque el mismo Michael Jackson pagó no 20 millones, sino 24 millones de dólares fuera de tribunales, para que el padre del menor retirara los cargos.
Sólo él sabía la verdad y la causa criminal quedó cerrada en octubre de 1994, después de trece meses de investigaciones y más de 400 interrogatorios.
Desde siempre, Michael mantuvo su inocencia y cuando le preguntaron si alguna vez había tenido algún contacto sexual con un menor contestó: "Nunca, nunca. Yo nunca podría herir a un chico. No es lo que siento en mi corazón, no es lo que soy yo..."
¿Por qué pagó entonces la indemnización que le evitó el juicio? Según él, por consejo de sus abogados, para darle un punto final a las especulaciones y un juicio que podía haber durado más años sin siquiera tener la certeza de poder ser declarado inocente, a pesar de su "consciente y completa inocencia".
Pero el juicio fue inevitable cuando surgieron nuevos cargos de otros menores y después de cinco largos meses, en Santa María, California, en mayo del 2005, la justicia finalmente lo declaró inocente por los cargos de abuso sexual de menores, aunque el público, ante la duda, ya lo había declarado culpable, mucho antes del veredicto oficial.
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